EL DEBATE SOBRE LA EVOLUCIÓN SIGUE ABIERTO
La evolución es la teoría sobre el origen de las especies más aceptada por la comunidad científica, aunque sus mecanismos concretos están aún por descubrir y en debate constante. Los nuevos descubrimientos en los distintos campos de la biología y la paleontología hacen que esta misión sea posible.
Cuando Charles Darwin publicó su libro “El origen de las especies” en 1859 todavía no tenía los medios para dar pruebas consistentes sobre los mecanismos concretos de la evolución, aunque sí para enunciar una teoría que sería la base de la biología moderna.
El mecanismo principal de la evolución del que Darwin hablaba en su obra era el de la competencia o “la supervivencia del mejor adaptado”, que se basa en el hecho de que cuando dos organismos entran en competición por un recurso sólo sobrevivirá el más fuerte transmitiendo así su información genética a sus descendientes. Poco a poco estos cambios se acumularán hasta dar lugar a la especiación o formación de una nueva especie.
Sin embargo ya desde hace tiempo muchos naturalistas y científicos observaron ciertas relaciones entre los cambios en el ambiente físico y el fenómeno de especiación. Gulick, naturalista del S. XIX, observó que a los dos lados separados por las coladas de lava en las islas volcánicas del archipiélago Hawaiano las condiciones ambientales eran muy similares y, sin embargo, los taxones hermanos divergían considerablemente en muchos de sus caracteres. Así dedujo que la especiación no podía ser explicada únicamente por “la supervivencia del más apto”, si no que tenían que estar implicados también factores de otra índole como geográficos, ambientales... (Gulick 1872, 1905). De hecho la polaridad entre competición y vicarianza ha estado siempre presente en el debate sobre la evolución.
Numerosos artículos y autores discuten diversas implicaciones biogeográficas, genéticas, reproductivas, comportamentales y paleontológicas de éstos dos modelos (Mayr, 1963, 1982; Paterson, 1981, 1982, 1985; Lande, 1979; Futuyma & Mayer, 1980; Tempelton, 1981, 1989; Carson, 1982; Butlin, 1989; y Vrba, 1985, 1995; Hdez Fdez 2005).
Entenderemos especiación como el proceso de divergencia fenotípica y genotípica mediante el cual una subparte de la especie parental desarrolla un nuevo sistema de fertilización incompatible con el de la especie parental.
En uno de los trabajos de Vrba (E.S. Vrba and D. DeGusta 2004) se plantea una pregunta que tiene diversas implicaciones teóricas: ¿Soporta la evidencia fósil la teoría de que la mayoría de las especies de grandes mamíferos empiezan como pequeñas poblaciones? Y si esto es así, ¿cuánto dura el intervalo de tiempo de crecimiento de estas especies hasta que se estabilizan y alcanzan su tamaño definitivo?
Las implicaciones teóricas de esta pregunta son:
- Si la especiación se da normalmente en pequeñas poblaciones entonces hay un papel predominante de la separación de lo que antes era un área geográfica de distribución continua de la especie (vicarianza). Las causas principales de esa separación son cambios físicos en la superficie terrestre (aunque también puede haber otras causas menos comunes como la colonización de un nuevo medio).
- Si es cierto que los cambios físicos tienen un papel fundamental en la especiación, entonces las regularidades de los cambios en el medio físico deberían corresponderse con las regularidades en la evolución biótica, lo que podría dar lugar a consistentes patrones macroevolutivos de los linajes en relación con los cambios ambientales.
- Esto implicaría unos vínculos más importantes entre la dinámica física y biótica que los tradicionalmente reconocidos. Así mismo esto podría implicar que la causa principal de la evolución no estaría restringida sólo al nivel de la interacción entre organismos y selección dentro de las poblaciones.
Sobre ésta hipótesis de partida trabajaron Vrba y DeGusta en 2004, intentando responder con el registro fósil a la pregunta de si las nuevas especies comienzan como pequeñas poblaciones, y sobre esa misma hipótesis trabajaremos en el grupo teórico de paleontología de vertebrados, intentando encontrar datos en el registro fósil de la Península Ibérica que aporten nuevos datos para responder a esa pregunta.
Referencias:
- Butlin, R. 1989 Reinforcement of premating isolation.
Speciation and its consequences (ed. D. Otte & J. A. Endler), pp. 158-179. Sunderland, MA: Sinauer
- Carson, H. L. 1982 Speciation as a major reorganization of polygenic balances.
Mechanisms of speciation (ed. C. Barigozzi), pp. 411-433. New York: Alan R. Liss
- Futuyama, D. J. & Mayer, G. C. 1980 Non-allopatric speciation in animals.
Syst. Zool. 29, 223-227
- Gulick, J.T. 1872 On the variation of especies as related to their geographical distribution, illustrated by the Achatinellidae. Nature 6, 222-224
- Gulick, J.T. 1905 Evolution, radical and habitudinal. Publication no. 25. Washington, DC: Carnegie Institution of Washington
- Hernandez Fernandez, M. & Vrba, E. S. 2005 Macroevolutionary processes and biomic specialization: testing the resource-use hypothesis. Evolutionary Ecology. 19, 199-219
- Lande, R. 1979 Effective deme sizes during long term evolution estimated from rates of chromosomal rearrangement. Evolution 33, 234-251
- Mayr, E. 1963 Animal species and evolution. Cambridge MA: Harvard University Press
- Mayr, E. 1982 Processes of speciation in animals. Mechanisms of speciation (ed. C. Barigozzi), pp. 1-19. New York: Alan R. Liss
- Paterson, H. E. H. 1981 The continuing search for the unknown and the unknowable: a critique of contemporary ideas on speciation. S. Arf. J. Sci. 77, 113-119
- Paterson, H. E. H. 1982 Perspective on speciation by reinforcement. S. Arf. J. Sci. 78, 53-57
- Paterson, H. E. H. 1985 The recognition concept of species. Species and speciation ( ed. E. S. Vrba), pp.21-23. Pretoria South Africa: Transvaal Musum Monographs No. 4
- Tempelton, A. R. 1981 Mechanisms of speciation: a population genetic approach. A. Rev. Ecol. Syst. 12, 23-48
- Tempelton, A. R. 1989 The meaning of species and speciation: a genetic perspective. Speciation and its consequences (ed. D. Otte & J. A. Endler), pp. 3-27. Sunderland, MA: Sinauer
- Vrba, E. S. 1985 Environment and evolution: alternative causes of the temporal distribution of evolutionary events. S. Afr. J. Sci. 81, 229-236
- Vrba, E. S. 1995 Species as habitat specific, complex systems. The reocgnition of species: speciation and the recognition concept (ed. J. C. Masters, D. M. Lambert & H. G. Spencer), pp. 3-44. Baltimore, MD: JhonsHopkins University Press
- Vrba, E. S. & DeGusta, D. 2004 Do species population really start small? New perspectives from the Late Neogene fossil record of African mammals. Phil. Trans. R. Soc. Lond. 359, 285-293